Como decíamos al principio, ha sido un año de consolidación. Consolidación de nuestras metodologías de trabajo con una impronta propia, que nos hace particulares y especialistas en el trabajo individualizado. Consolidación de los procedimientos, sabiendo qué hay que hacer para conseguir qué cosa en cada momento. Consolidación de una plantilla sólida y estable que cada día han aportado todo lo que saben y sienten a favor de la mejora de la calidad de vida de nuestros usuarios/as.
También de vitalidad, entendida como energía, ganas de vivir, de entregar, como actividad, ilusión, etc. Como dijo Fitzgerald “La vitalidad se revela no solamente en la capacidad de persistir, sino en la de volver a empezar”. Hemos tenido que empezar de nuevo en muchos aspectos, en buscar la mejor forma de acercarnos los unos a los otros, en encontrar los mejores elementos de motivación para nuestros usuarios/as, en superar dificultades, etc
2009 ha sido un año para recordar, de mucha actividad, de momentos especiales, de aprender, de mejorar. Grande. Intenso. Nuestra residencia es hoy más parte de la familia FEPAMIC, es más un hogar, un sitio donde compartir es un poquito más que antes todo aquello que esperábamos.
Paco López
Director del centro